“Cuando nacimos, estábamos perfectamente programados. Teníamos una tendencia natural a concentrarnos en el amor.
Nuestra imaginación era creativa y floreciente, y sabíamos usarla.
Estábamos conectados con un mundo mucho más rico que el mundo con el que
ahora nos conectamos, un mundo lleno de hechizo y del sentimiento de lo
milagroso.
¿Qué nos pasó entonces? ¿Por qué, cuando llegamos a cierta edad y miramos a nuestro alrededor, el hechizo había desaparecido?.
Porque nos enseñaron a concentrarnos en otras cosas. Nos enseñaron a
pensar de forma antinatural. Nos enseñaron una pésima filosofía, una
manera de mirar el mundo que está en contradicción con lo que somos.
Nos enseñaron a pensar en la competición, la lucha, la enfermedad,
los recursos finitos, la limitación, la maldad, la culpa, la muerte, la
escasez y la pérdida. Y como empezamos a pensar en estas cosas,
empezamos a conocerlas. Nos enseñaron que sacar buenas notas, ser
buenos, tener dinero y hacerlo todo como es debido son cosas más
importantes que el amor.
Nos enseñaron que estamos separados de los demás, que tenemos que
competir para salir adelante, que tal como somos no valemos lo
suficiente.
El amor es aquello con lo que nacimos. El miedo es lo que hemos
aprendido aquí. El viaje espiritual es la renuncia al miedo y a la nueva
aceptación del amor en nuestro corazón, el amor es nuestro propósito
sobre la tierra. Tener plena conciencia de él, tener la vivencia del
amor en nosotros y en los demás, es el sentido de la vida…
… El amor no es material, es energía. Es el sentimiento que hay en
una habitación , en una situación, en una persona. El dinero no puede
comprarlo. El contacto sexual no lo garantiza. No tiene absolutamente
nada que ver con el mundo físico, pero a pesar de ello, puede
expresarse….
…El miedo es la falta de amor que todos compartimos, nuestros infiernos
individuales y colectivos. Es un mundo que sentimos que nos presiona
desde adentro y desde afuera, dando constantemente falso testimonio de
la insensatez del amor…
El amor está dentro de nosotros. Es indestructible, sólo se le puede
ocultar. El mundo que conocimos de niños sigue aún sepultado en nuestra
mente.
Y en eso consiste un milagro: en la desaparición de las nieblas, en un cambio de la percepción, en un retorno al amor.”
“Volver al amor”
Marianne Williamson
jueves, 6 de febrero de 2014
Volver al amor
Publicado por Sonia en 9:39 0 comentarios
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